(Viernes 22 de abril)
Vale. Que si. Postear entrenos con dos días de retraso no queda bonito. Lo sé.
Veréis, lo del viernes fue tan especial, tanto, que he necesitado dos días para encontrar un título que me agradase. Pensé:
Running under the rain II
La tormenta y mis Nike
Llueve, en los cristales mojados llueve y llueve
Que bonito es el fresquito que te moja poquito a poquito
Agua que no has de beber, déjala correr
Y entonces me acordé de la Virgen del Rocío, aquel año en el que me llevaron obligada (soy atea al cubo) con promesas de borrachera y despendole sin fin (así fue, todo muy cristiano) Y dije ¡Bautismo runners! Las asociaciones extrañas que establece mi intelecto son un misterio para mí…
El viernes salí a correr con un día fresco y despejado, solo con alguna que otra nube oteando el horizonte y volví con la oscuridad, el rayo y el trueno y más mojada que mi fish en su acuario de 20 litros.
Como mola correr mientras el agua te cae encima a lo bestia. Como mola correr mientras el agua te cae encima a lo bestia y no tienes un portal donde ponerte a cubierto. Como mola correr mientras el agua te cae encima a lo bestia y no tienes un portal donde ponerte a cubierto porque estás a 4 km de tu casa, rodeada de marismas de arbusto raso, húmedas por ende… Como mola.
En serio… Como mola.
Todo esta mojado a mi alrededor.
Aprieto el paso, corro (¿corro? ¿Ir a 6´40 es correr?) Me río. El sonido de mis zapatillas en el asfalto es el mismo que el de mis zapatos de material cuando iba al colegio.
El mismo.
Entonces me veo a mi misma con el uniforme gris de cuadros, camisa blanca, rebeca, calcetines y zapatos azul marino. Dos trenzas y horquillas. Llueve a cántaros y a la salida del colegio, todas las niñas esperan en el enorme portalón a que cese de llover. Yo también. Eran tiempos aquellos en que los niños iban y volvían solos del colegio. Pero entonces, salgo del portal y empiezo a correr, pero me canso enseguida y opto por caminar. El uniforme, mi pelo, mi cara se va empapando poco a poco.
-Te vas a mojar-. Me grita una compañera de clase. La miro y levanto los hombros.
El trayecto desde el colegio hasta mi casa es de cinco minutos caminando y los hago muy despacio. Hay algo mágico en caminar bajo la lluvia o correr, y eso lo saben todos los niños. Todos los niños listos claro.
Así que no me queda otra que correr hasta casa (lo de andar lo dejamos para tiempos pretéritos), feliz, sintiéndome, ahora sí (la primera no se valía, que solo fueron cuatro gotas) una auténtica runners.
Levante
Frío
Calor
Agua.
Ni que decir tiene que los conductores de los pocos coches que pasaban me miraban igual que mi antigua compañera de clase…
Distancia: 8.900
Tiempo empleado: 58´51
Ritmo medio: 6,36
Sensaciones: I run under the rain…
Por eso dicen: "esos locos que corren" porque cuando la lluvia esta en su apogeo, para nosotros los runners es vitalidad, aunque si, de repente como que llega a ser un poco molesto, en cierta ocasion, sali a hacer mi distancia, empezo a lloviznar, yo agradeci a los cielos ese momento y como que el cielo dijo ah si, pues ahi te va un aguacero, tuve que resguardarme debajo de una marquesina, cuando paro de llover no sabia si continuar uo regresar a casa, estaba hecho una sopa, al final decidi seguir haciendo mi largada.
ResponderEliminarCorrer bajo la lluvia, cuando muy pocos se areven, cuando eres de los pocos que está ahí fuera, es una de las mejores experiencias que da este deporte.
ResponderEliminarYo también adoro correr bajo la lluvia!!!!!
ResponderEliminarYo también el viernes tuve esa experiencia, aunque en bici, y tambié disfruté muchísimo.
ResponderEliminarLa sensación de libertad aumenta mucho corriendo bajo la lluvia. Y luego la ducha caliente se disfruta el doble, y si ya vas con las piernas llenas de barro ni te cuento.
ResponderEliminarLa lluvia forma parte de la vida del runner.. quien no se ha mojado mas de una vez,personalmente prefiero la lluvia al viento.. este si que es molesto.
ResponderEliminarMe ha encantado tu entrada!
ResponderEliminarSolo los enganchados a esto del running entendemos lo que es correr contra viento y marea, disfrutar haciendolo bajo un aguacero o mientras nieva, en definitiva, permanecer en movimiento cuando los demás mortales se agazapan esperando que cambie el tiempo.
Felicidades por ese disfrute!
Genial entrada y genial vídeo.
ResponderEliminarSalud!
PD: Te nombré en mi último "post", espero que no te importe.
Gracias por los comentarios!
ResponderEliminarCorrer bajo la lluvia despertó sensaciones que hacía mucho tiempo no recordaba.